Extraña

La música me atormenta siempe menos que la oratoria ajena.

Me siento antigua…20 años intentando evitarme.

y aún mis nervios explotan ante….

aún quiero llorar,

aún me hace falta,

que estúpida presencia.

¡Hablame, oh Dios!

Drámatica llegada, para esperar la próxima carrera.

Me he enviciado contigo, conmigo y éste simbolo fálico entre los dedos.

Ahora desfallezco, ni siquiera te he contado mi felicidad, tan solo hoy, a la mitad del camino no me han dejado las fuerzas, vuelvo a estar a tu disposición.

Sí mi mano derecha no confía en sus dedos…

Quiero desaparecer, quiero Dominar.

Cuando todo va mal, es cuando todo ha ido bien.

Esperando

Hoy el Gesto se presenta Tenso y Amargo.

Se cierne el Miedo alrededor mío,

la Humillación ajena, me humilla,

el Sacrificio es inutil,

la Solución imposible.

La Ironia domina la situación.

El Absurdo impera sobre la Lógica.

¿A quien importa mi alegría? ¿a quien?

La Esperanza no está en mi mano, me la han robado.

La verdad es Desafiante, describe tu ignorancia.

¡No podrás!, estoy algo cansada, algo debil, algo encogida.

Aprovechando que la Magia está por aquí.

No debo dejarme engañar.

¡diosa ayudame!

viajando

Sigo creyendo que para hacer la guerra es mejor en el silencio.

Me duelen los sentimientos que plantados, son arrancados una y otra vez.

Me concienzo en que el error está en cómo y cuando .

El cinismo sigue reinando sobre la Tierra.

El Sol está a punto de convertirse en una nube.

por favor «No molesten»

Es ridícula la Madurez conseguida «por encargo»

Maldita Historia.

Me llamo cobarde por desertar antes de la Guerra.

¿Por dónde empezamos, para aclarar las cosas?

Me encerraré conmigo por toda compañia,

¡paciencia!

Locura

Manos rugosas, ancianas como la tierra, piel de tronco milenario.

No necesito más que música para soportar la soledad, pero no, no podreís hacerme mudar las hojas, soy un arbol perenne, ¿me ois? y todos esos simbolos fálicos, No son mas que flechas imposibles de poner en un arco-

Sois terriblemente presos de vuestra existencia.

Enloquecidos polluelos tras su madre.

Mamá ha muerto_ ¿lo oyes?_ ¡muerto!

Soliloquío

Es la guerra miserable volcandose en crear enemigos que vencer, es la lucha del Alma por no verse perdida, sin orden en el camino hacia la salida qué la libere de éste cuerpo, que la abraza tan fuerte que la mata.

….y eso es lo que se de ella.

Y lo que quiero es hablarte,

párate un momento, deja que te cuente…

Mi vida es ese tiempo que estaremos juntas.

Sé que no te iras sin mi.

¿Esperas acaso que luche por tí?

Se que me necesita.

No se si lo sabe.

No son necesarias mas armas, ya puedo hablar con mi Alma.

Verde

….Y aquella tarde tenía la sombra de los objetos verdes.

De los conceptos verdes.

De las ideas verdes.

Hasta ahora la luz y la sombra cohabitaban como los amantes.

Y de pronto… todo se quedó verde.

Verde oscuro.

Verde noche. Verde como los bosques una noche de luna nueva.

Aquella tarde sabía el aire a moho y olía a lluvia.

Los rostros de los seres parecian de corteza de arbol.

Sobrenaturales, irreales, inertes.

REFLEXIONES DE UNA APRENDIZ DE REBELDE

Hace bastante información de mi mente, cuando empecé a marcar mis primeros límites, mis ideas… preparaba mi vida para la tortura mas privativa de ella; el fin, nada, sanseacabó.

Éste período de mi viaje determinaría otro tipo de medida de la realidad que se perdía en mi camino.

Apropiarme de mis neuronas _ «inocente niña»_ por medio de constatar mi identidad.

Con expresiones que he querido apropiarme, más absurdas que las ya impuestas, pero creadas para mi exclusiva comprensión del mundo.

Caminé, dia a dia, esación tras estación y curso tras curso, sujeta al ritmo de una medida que se llamaba tiempo y mi vida continuaba siendo la de una niña de 17 años, una cria, si, pero una cría que era un atroz envase de inconformismo, dispuesta a perder de vista mi control individual.

Si el tiempo es compartido por todos y la vida es una concienzudo Aro que me ata al Tiempo, ese Aro es mi vida, única y común y corriente.

Defiendo sin maldad pero sin miedo ese Aro que acompaña mis enseñanzas, y tantas otras debilidades.

¿Quién tiene el poder de repartir el tiempo en obtusas y enrevesadas asociaciones?

Quizas el Universo, con su edad descomunal, también espera que pase el Tiempo viendolo impávido morir en otros.

¡Quién soy yo para preguntar si nos mata el tiempo!

¿es una exigencia del Universo vivir el tiempo que nos reparte concienzudamente?

Mi vida sería el resumen de otras vidas desconocidas, que encontré en mi mente, sino le hubiera robados los ojos al universo, y llevado mas allá de mi condición de estar.